El servicio de FGV genera un ahorro de 73 millones anuales


La Universidad de Karlsruhe elabora un método para fijar el impacto del transporte

El servicio que presta día a día Ferrocarrils de la Generalitat Valenciana (FGV) a más de 200.000 usuarios en sus explotaciones de Metrovalencia y TRAM Metropolitano de Alicante supone un ahorro a la sociedad de 73,5 millones de euros anuales en costes externos, según se desprende al aplicar el método de cálculo elaborado por la Universidad de Karlsruhe y la consultora suiza Infras para fijar el valor económico de las externalidades.

Todos los modos de transporte llevan asociados unos gastos directos y tangibles que se tienen en cuenta a la hora de establecer el coste del mismo (combustible, mantenimiento y personal principalmente) y otros indirectos que no entran en estos costes ni se recogen en los balances económicos ni en las cuentas de pérdidas y ganancias pero que gravan a la sociedad en general.

A estos costes se les denomimada externalidades y comprenden una gran cantidad de componentes, algunos de ellos de difícil cuantificación, como es la accidentabilidad, el cambio climático (fundamentalmente las emisiones de CO2), la contaminación acústica y atmosférica, efectos urbanos (ocupación del terreno), el impacto ambiental y paisajístico, la huella ecológica (costes antes del viaje, fabricación del vehículo o energía utilizada y después del viaje y reciclaje), o la propia congestión de tráfico derivada del uso de medios de transportes privados.

Para tomar una referencia, por ejemplo, de este último punto, la congestión del tráfico se puede cifrar en 100.000 vehículos más que circularían a diario por la ciudad de Valencia si la explotación de Metrovalencia no existiera y la mayoría de sus usuarios se pusieran delante de un volante para recorrer por las calles de la capital. Desde este prisma, la utilización del transporte público en lugar de otros modos de transporte mecanizados, reducen considerablemente los costes por externalidades, en especial el ferroviario al ser el más ecológico.

El cálculo de los ahorros que representa el servicio que ofrece FGV se realiza mediante la hipótesis de sustitución del modo de transporte si la empresa pública de transportes autonómica no existiera.

Cambio climático

Con la hipótesis de que de cada cien viajes de FGV, en torno a 65 se harían en automóvil, 20 en autobús y 15 en motocicleta, el incremento por costes externos estaría en el entorno de los 70-77 millones de euros al año, dependiendo del escenario (alto o bajo) que se tome de los costes derivados del cambio climático, los más difíciles de concretar al non existir un consenso.

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